Samsung ha presentado oficialmente su nueva línea de smartphones Galaxy S25, marcando un punto de inflexión en la estrategia de la compañía para competir en un mercado móvil cada vez más saturado y competitivo. Con un enfoque decidido en la inteligencia artificial, la empresa surcoreana busca diferenciarse de sus principales rivales, Apple y los fabricantes chinos, mediante el desarrollo de funcionalidades que transforman el dispositivo en un verdadero asistente digital personal.
La serie S25, compuesta por tres variantes (S25, S25+ y S25 Ultra), llega con precios que van desde los 799 hasta los 1,299 dólares, reflejando una apuesta por mantener su posición premium en el mercado de los smartphones de alta gama. La presentación se produce en un momento crítico para Samsung, cuyas cifras de envío han experimentado una contracción del 2.7% en el último trimestre del año anterior, perdiendo terreno frente a competidores como Apple y fabricantes chinos emergentes.
El punto central de esta nueva línea es Galaxy AI, un conjunto de aplicaciones de inteligencia artificial diseñadas para potenciar la experiencia del usuario. Las nuevas funcionalidades permiten realizar tareas complejas que atraviesan múltiples aplicaciones con un simple comando: desde encontrar el calendario de un equipo deportivo hasta localizar restaurantes amigables con mascotas y compartirlos con contactos específicos.
En colaboración con Qualcomm, Samsung ha desarrollado un procesador personalizado, el Snapdragon 8 Elite para Galaxy, que promete ser el más rápido incorporado hasta ahora en un dispositivo de la marca. Este chip no solo mejora el rendimiento, sino que está específicamente optimizado para manejar cargas de trabajo de inteligencia artificial sin comprometer la duración de la batería.
La serie S25 también introduce modificaciones significativas en su diseño, abandonando las líneas angulares de generaciones anteriores por esquinas más redondeadas, lo que sugiere una evolución estética alineada con su revolución tecnológica.
Aunque los analistas como Ben Wood de CCS Insight reconocen la innovación, también advierten que estas mejoras podrían no ser suficientes para incentivar actualizaciones inmediatas entre usuarios con dispositivos recientes. No obstante, la apuesta de Samsung representa un movimiento estratégico para capturar un segmento de consumidores con teléfonos de tres o cuatro años de antigüedad.
La preventa comenzará de manera inmediata, con la disponibilidad oficial de los dispositivos programada para el 7 de febrero, marcando el inicio de una nueva era en la cual la inteligencia artificial se posiciona como el diferenciador clave en la batalla por el mercado de smartphones.